Escalar una montaña es una actividad que requiere preparación. Es un proceso y una experiencia de aprendizaje. Desde la antigüedad se ha relacionado el ascenso a una montaña con un viaje hacia lo más elevado y espiritual del ser humano, que teniendo que afrontar todo tipo de dificultades, tiene como propósito esencial aprender cómo conducir nuestra vida en una forma realmente EFECTIVA.
De este modo, al igual que la vida, escalar una montaña representa un proceso de crecimiento y desarrollo personal e interpersonal que requerirá no solo de grandes esfuerzos continuos, sino también de mucha PACIENCIA.
Por lo tanto, deberemos PAGAR EL PRECIO durante largo tiempo (preparación, siembra) para cosechar los beneficios de lograr hábitos que nos eleven a lo más alto que podamos subir en la vida.
TU ASCENSO PERSONAL A LA CIMA
¿Qué ocurre cuando escalas una montaña?
1- Esfuerzo (Salir de zona confort)
2- Obstáculos (Oportunidades)
3- Resbalones (Firmeza)
4- Tropiezos (Enfoque)
5- Caídas (Aprendizaje)
6- Retrocesos (Corrección, rediseño)
7- Acampadas (Descanso)
8- Clima (Percibir el exterior)
9- Pertenencias (lo que cargamos)
10- Personas (mi red de ayuda)
11- Fuerza de gravedad (viejos hábitos)
Algo que la mayoría no hacemos (olvidamos) al enfocarnos tanto en nuestras metas (cima), es DETENERNOS PERIÓDICAMENTE A OBSERVAR EL PAISAJE, Y ASÍ PODER AMPLIAR NUESTRA VISIÓN Y OBTENER NUEVAS PERSPECTIVAS!!!
¡Abrazos al corazón!
Alex Vales – Facilitador de Talleres Conversacionales en las Organizaciones.
Recuerdo ese seminario. Que bueno que estaban… ¿cuando vuelven? jajajaja!!!
Un abrazo. Ale